DATOS DEL CONCIERTO
Artista: Iván Ferreiro
Fecha: 23 de enero de 2025
Lugar: Hivernacle Poble Espanyol, Barcelona
Festival: Guitar BCN
Promotora: The Project
Fotografías: Eva Ortiz | Crónica: Yolanda Llopis
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Atrincherados en el pop de Iván Ferreiro
Cita con el Guitar BCN. Una de las primeras de este festival que llena las noches de Barcelona de música durante los meses más áridos de festivales. El escenario, el Hivernacle del Poble Espanyol, que protege del frío su plaza mayor bajo una cúpula transparente desde donde ver la estrella polar. Un invernadero de plantas y música.
Quienes subimos la ladera de Montjuic este jueves de enero, esperamos con ganas explorar las trincheras del pop que nos trae un grande, Iván Ferreiro.
El gallego llega a Barcelona algo más de un año después de presentar en Razzmatazz su último trabajo, el premiado Trinchera Pop, un álbum escrito a fuego lento que le llevó a arrasar en los Premios de la Academia de la Música con 3 galardones (compositor del año, mejor álbum pop/rock y mejor canción pop/rock).
A estas alturas Iván Ferreiro ya no tiene que demostrar nada, sin embargo, sigue haciéndonos vibrar, ya sea con sus temas nuevos, como con los antiguos, entre ellos los himnos colectivos de su etapa en Los Piratas.
Ni que decir que llega acompañado de sus músicos habituales, Ricky Falkner al bajo, Xavi Molero a la batería, Pablo Novoa a los teclados y acústicas, y a las guitarras Emilio Saiz y su inseparable hermano Amaro Ferreiro.
El nuevo disco es intenso, con sonidos electrónicos y melodías in crescendo combinadas con las guitarras y los sonidos más contundentes. En alguna entrevista antigua leo que es una reivindicación de la música popular, de sonido más electrónico y tono más reflexivo.
Y tendremos ocasión de comprobarlo a lo largo de la noche, donde nos espera un setlist con 8 canciones de esa trinchera.
El concierto arranca con cierto retraso y, como es habitual, en los inicios de sus temas con Iván parapetado tras el teclado. No se ha desprendido de la chaqueta, temiendo quizás una noche gélida de enero, pero no tardaremos en entrar en calor, arriba y abajo del escenario.
“Canciones para no escapar” es la encargada de abrir el repertorio. Tras ella, mensaje de amor y complicidad a la ciudad, donde siempre se siente bienvenido, al Guitar BCN, y también un recuerdo sentido para Joan Rosselló, el recientemente desaparecido co-fundador de The Project, a quien dedican el concierto.
Advertencia: no habrá bises, van a tirar palante, y a centrarse en las canciones y en las emociones. ¡¡Bien!!
Así que vamos avanzando y disfrutando con temas como “La gran belleza y la juventud”, “Inerte”, “M” o “Extrema Pobreza”… Después de «Pinball», llega «Dejar Madrid», que bien podría cambiarse por dejar Barcelona. La cosa es volver a los pueblos. Amaro y él, que son de pueblo, abogan por emprender ese camino de huida de la ciudad.
Seguimos con esas canciones para el tiempo y la distancia que nos dejaron Los Piratas, como «Santa Adrenalina».
«El Dormilón» suena genial y la gente la recibe con alegría y móviles arriba mientras Iván salta, baila y se pasea por la pasarela con aquellos ademanes made in Ferreiro. Que las noches con sus lunas y la lunas con sus huesos, nos secuestren a los dos… Y vuelta al teclado para finalizar, …que los años y el presente nos sorprendan a los dos. ¡¡Qué bonita!!
“Una inquietud persigue mi alma”, de naves, planetas y astronautas, precede a uno de los temazos del indie pop español que se agradece esté en el repertorio. La primera nota del “El equilibro es imposible” sirve para que el escenario enmudezca y mientras Iván nos acompaña sentado al teclado, cantamos desde lo más profundo de nuestros días de juventud. No te diré que no yo te sigo porque creo que en el fondo hay algo.
Seguimos con “El pensamiento circular” y “Miss Saigon” hasta llegar a “En el alambre”, una auténtica muestra de esa experimentación electrónica de Trinchera Pop, que abraza textos en los que no pueden faltar los desencuentros y desamores, ese dialogo imposible del amor y entropía subyacente en el placer. Puede que al final, tengamos que dejarnos caer… Iván estrecha la mano de las primeras filas. Su voz nasal y lánguida, parece prolongarse todavía más con cada una de las programaciones. Si las piezas no conectan y el mundo es una mierda, cómo te las vas a arreglar… Como dice la canción, cientos no son una unidad, pero en el hivernacle, todos somos uno.
La complicidad fraternal, siempre tan presente en los Ferreiro, se acentúa todavía más en otro de los clásicos del repertorio. «SPNB», acrónimo de «Son preciosos nuestros besos». Una ranchera cantada en acústico. La guitarra de Amaro y los besos que Iván regala con la mano. Son preciosos nuestros besos a las afueras del pueblo. Y en el pueblo, en nuestro Poble Espanyol precisamente, cantamos: Qué puede tener de malo si es lo que mejor hacemos.
“La humanidad y la tierra” que en el álbum cuenta con la colaboración de Tanxugueiras, y que es una de las canciones más eléctricas y de corte más roquero, invita al baile de todos los que llenamos el recinto.
El concierto está muy arriba, así que no hay nada como recibir con canto colectivo al himno de los «Años 80». No son las 7:27 ni es septiembre, pero no hay nadie que no le cante al tipo que algún día fuimos, mientras Iván, nos escucha y se pasea del teclado a la pasarela, auriculares on, auriculares off. Expresión de disfrute máximo también entre los músicos.
Tras la atmósfera roja que tiñe «El viaje de chihiro», presentación al equipo técnico. Aplaudimos a todo el mundo, también a esas personas maravillosas que les ayudan a terminar los discos y a producirlos, Santos y Fluren, presentes entre el público.
El concierto va acabando, aunque un Iván atemporal tiene todavía ganas de comerse el mundo, y salta y baila más que nunca mientras suena “Como conocí a vuestra madre”.
“Diecinueve y Turnedo”, signo de identidad generacional, aparecen seguidas. Iván Ferreiro aplaude al público entre muestras y palabras de agradecimiento.
Superada ya la hora y media de concierto, nos agasaja con un último tema que servirá para cerrarlo. Es también el tema que cierra su disco.
“En las trincheras de la cultura pop”, tiene unas bases barrocas extraídas directamente de la reinterpretación que Max Richter hizo de la Primavera de Vivaldi, y es uno de mis temas top del nuevo álbum.
Puede que mi cuarto sea una trinchera pop, todo lo que te cura te aguarda en las trincheras de la cultura pop.
Puede que mi casa sea una trinchera pop
Puede que mi vida sea una trinchera pop.
Puede que el Poble Espanyol haya sido esta noche una auténtica trinchera pop. Así que avisados estáis: si alguien nos busca, estamos atrincherados en el pop de Iván Ferreiro.